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Certificaciones LPM: tipos y tips para obtenerlas

En el mundo jurídico, cada vez es más frecuente aplicar técnicas de gestión de proyectos, conocidas como Legal Project Management (LPM), con el objetivo de organizar y optimizar los procesos legales de una manera que sea eficaz, optimizando costes, orientada al cliente, y centrada en los resultados. De hecho, el LPM es una tendencia en alza, particularmente en grandes firmas de Estados Unidos, Reino Unido, y, en menor medida, pero cada vez más, España.

En YML, apostamos por integrar el Legal Project Management en nuestro día a día, convencidos de que es un pilar fundamental para diferenciarnos en el sector y aportar un valor añadido a nuestros clientes. Para posicionarnos como referentes en esta área, hemos adoptado el LPM como modelo y hemos obtenido una certificaciónespecializada, lo que refuerza nuestra experiencia y compromiso con la gestión de proyectos legales.

Efectivamente, para aquellos profesionales dedicados al LPM existen certificaciones que validan su conocimiento y capacidad en esta disciplina. Sin embargo, surgen algunas preguntas clave: ¿cuáles son las certificaciones disponibles y en qué se diferencian? ¿Qué formación o requisitos se necesitan para obtenerlas? ¿Y cuáles son los pasos esenciales para conseguirlas?

 

Certificaciones en Legal Project Management

En el mercado actual, existen varias certificaciones que acreditan conocimientos y habilidades en gestión de proyectos legales. Estas certificaciones son una valiosa adición para los profesionales jurídicos que desean liderar o formar parte de equipos de gestión de proyectos en el sector legal.

1. Legal Project Associate (LPA)

La certificación Legal Project Associate está diseñada para profesionales del derecho o de áreas relacionadas que participan en la gestión de proyectos legales sin liderarlos. Este tipo de certificación es ideal para aquellos que tienen conocimientosjurídicos y forman parte de un equipo de gestión de proyectos legales, pero no ejercen un rol de liderazgo.

Para obtener esta certificación (que no caduca nunca), no se exige ningún requisito en cuanto a experiencia profesional, puedes obtenerla si eres un miembro del equipo del proyecto legal; un asistente legal; un estudiante de derecho; o personal de apoyo. Es decir, puedes adquirirla incluso si no trabajas en la profesión legal, los candidatos simplemente deben completar un curso de 14 horas de formación en LPM.

2. Legal Project Practitioner (LPP)

La certificación LPP es reconocida a nivel global y está dirigida a aquellos profesionales que ya poseen un conocimiento avanzado en LPM y son capaces de liderar proyectos legales, como los gerentes de proyectos, abogados, profesionales con experiencia en departamentos jurídicos, juzgados, asesorías, etc. En YML, esta es la certificación que hemos decidido obtener para fortalecer nuestro equipo y ofrecer un servicio más completo y especializado a nuestros clientes.

Para obtener la certificación LPP, es necesario completar un curso de 21 horas en LPM con un proveedor acreditado por el IILPM. Además, hay que cumplir al menos uno de los siguientes requisitos:

Se requiere ser abogado cualificado (con o sin licencia de ejercicio); haber completado un programa universitario impartido por un Proveedor Acreditado de Capacitación (ATP) de IILPM; tener al menos un año de experiencia trabajando en un bufete de abogados; haber desempeñado funciones como asesor legal interno durante al menos un año; y/o haber colaborado con firmas de abogados en calidad de consultor, asesor o formador durante al menos un año.

3. Legal Process Improvement Professional (LPIP)

La certificación LPIP está orientada a quienes desean adquirir conocimientos en diseño y mejora de procesos legales (mejora del negocio, de la tecnología o de sus procesos). A diferencia de las certificaciones LPA y LPP, el LPIP se enfoca específicamente en la optimización y mejora continua de los procesos, no tanto en la gestión de proyectos legales. Es decir, el LPIP se centra exclusivamente en la optimización de procesos internos y no tanto en su gestión.

Para obtener la certificación LPIP, los candidatos deben completar un curso de 14 horas en mejora de procesos legales, impartido por un proveedor acreditado. Esta certificación es una opción sólida para quienes desean profundizar en la mejora de procesos sin necesariamente tener un rol de gestión de proyectos.

 

¿Qué hay que hacer para obtener una certificación LPM?

A continuación, os dejamos algunos tips para aquellos que estéis interesados en obtener alguna de las certificaciones anteriores:

1. Evaluar tus objetivos: Antes de elegir una certificación, evalúa en qué etapa de tu carrera te encuentras y qué rol deseas desempeñar en un equipo de gestión de proyectos. La LPA es ideal para quienes desean ser parte del equipo, mientras que la LPP es para aquellos que aspiran a liderar proyectos.
 
2. Investigar programas acreditados: Asegúrate de optar por programas ofrecidos por proveedores acreditados por el IILPM. La formación de calidad es clave para obtener el conocimiento necesario y, al mismo tiempo, asegurar el valor de la certificación.
 
3. Adquirir experiencia práctica: Además de la formación, es importante contar con experiencia práctica en la gestión de proyectos legales. Participar en proyectos, aunque no sea como líder, ayuda a desarrollar una comprensión completa del proceso.
 
4. Cambiar el mindset del ejercicio profesional: Es importante tener capacidad adaptativa y una mente abierta para afrontar nuevas formas de trabajar, las softskills son necesarias para la gestión de proyectos legales.
 
5. Tener conocimientos jurídicos: Tanto saber cómo trabaja tu cliente, como conocer ciertos conceptos legales es primordial para conocer en profundidad el porqué del día a día de un despacho.
 
6. Continuar aprendiendo: La gestión de proyectos es una disciplina en constante evolución. Una vez obtenida la certificación, sigue formándote y mantente al tanto de las tendencias y novedades en LPM.
 

 

Nuestra elección: ¿Por qué la certificación Legal Project Practitioner(LPP)?

En YML, nuestra decisión de certificarnos en Legal Project Practitioner™ (LPP)surge de nuestra visión de transformar el despacho en una verdadera empresa gestionada de forma estratégica. Fue en ese camino donde descubrimos el Legal Project Management (LPM). Durante el curso, entendimos que esta metodología no solo mejora la gestión interna de la firma, sino que también puede aplicarse a la organización de los proyectos de nuestros clientes.

Esto nos permitió abordar dos tipos de proyectos:

1. La gestión interna del despacho YML Iurister, tratándolo como un proyecto en sí mismo, con tareas y objetivos claros.
 
2. La gestión de los asuntos de nuestros clientes, abordando cada caso como un proyecto único, estructurado en tareas y subtareas para garantizar su progreso eficiente.
 

Este enfoque ambicioso no solo optimiza nuestros procesos, sino que también genera confianza en nuestros clientes, ya que les ofrece un control total sobre sus asuntos legales, haciéndolos parte activa de la gestión.

 

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