El derecho laboral es aquel que regula las relaciones entre empleadores y personas trabajadoras; se presupone una posición de superioridad de la empleadora frente a la persona trabajadora, por lo que otorga ciertas garantías y prerrogativas a éstas últimas.
En este artículo abordaremos cómo las políticas empresariales son las garantes de un buen clima laboral y de cumplimiento de derechos y deberes de las partes.
¿Cuándo comienza la política laboral de un negocio?
Cuando una empresa empieza a funcionar y a generar el volumen suficiente para plantearse la ampliación de la plantilla, debe, en primer lugar, realizar un análisis de situación que evalúe si las políticas empresariales van a garantizar la salvaguarda de los derechos laborales (y no laborales) de las nuevas incorporaciones.
Por ello, es fundamental analizar la información empresarial a efectos laborales, ya que, si desde el inicio se elabora una adecuada estrategia de captación de talento, contratación y relaciones laborales, se generará un mejor ambiente de trabajo, y como consecuencia de ello, un aumento de la productividad.
Todos sabemos que lo fundamental en una empresa en la que conviven, durante muchas horas, diferentes perfiles es fomentar ambientes neutrales en los que cada individuo pueda desarrollarse profesional y personalmente.
¿Cómo formulamos esas estrategias laborales?
Debemos tener en cuenta ciertas cuestiones para responder a las necesidades conciliatorias, por ejemplo:
- Analizaremos cuál será el mejor horario de nuestra empresa para que las personas trabajadoras puedan conciliar su vida personal con la jornada laboral.
- Valoraremos la flexibilidad de la jornada de trabajo
- Estudiaremos la posibilidad real del teletrabajo
- Abordaremos los permisos retribuidos y no retribuidos
- Elaboraremos políticas de igualdad
- Etc.
Los paseos que seguiremos para la creación y formalización de un puesto de trabajo, son los siguientes:
- Primero se creará formalmente el puesto de trabajo, siempre teniendo en cuenta la legislación aplicable en materia de prevención de riesgos, retribución y categoría profesional, tipología de contratación, entre otras cuestiones que dependerán de cada puesto y sector.
- Una vez realizado este análisis previo, deberemos entrar en fórmulas para la contratación de perfiles adecuados y con talento para nutrir adecuadamente los procesos y la productividad.
- Para ello, elaboramos un contrato laboral adecuado a las necesidades de cada puesto, definiendo el clausulado y las condiciones en las que se desarrollará la relación laboral.
Una vez finalizada la fase de contratación, comienza la relación laboral
La etapa que efectivamente se desarrolla en el día a día y que crea relaciones de mejor calidad si cuentas con el adecuado asesoramiento.
Una de las claves para conseguir un ambiente laboral positivo es tener definidas las estrategias de comunicación y los canales por los que fluirá la información, mantener entornos estratégicos de cooperación y desarrollo de los profesionales y, todo ello, puede estar apoyado en la tecnología.
Durante toda la relación laboral el empleador debe garantizar los derechos individuales y colectivos, respondiendo adecuadamente ante la ejecución de los deberes de todos los implicados.
No debes olvidar que el empleador tiene una posición de garante y debe mediar y colaborar, en todo momento, con su personal para el buen funcionamiento de la actividad empresarial.
Recordamos que los derechos de las partes y, en particular, de la persona trabajadora vienen detallados en los artículos 4 y 5 del Estatuto de los Trabajadores.
La realidad laboral de una empresa es esencial en su posicionamiento en el mercado y su reputación corporativa
Actualmente nos encontramos en un cambio de paradigma laboral, las nuevas generaciones irrumpen con otras necesidades y otros valores, afrontando la empresa tradicional un nuevo escenario.
Un escenario en el que la captación de talento se convierte en la estrategia principal de las políticas empresariales: la flexibilidad horaria, locativa y funcional se contraponen al tradicional “calentar la silla”; los salarios dejan de ser puramente económicos para ser también emocionales; y, la ejecución de tareas repetitivas se superpone a la ejecución por proyectos.
La clave para conseguir un buen entorno laboral apoyado en la figura del Legal Project Manager
Contar con un asesoramiento legal que también tenga en cuenta las nuevas necesidades laborales de las empresas y de los aspirantes a ocupar vacantes, se convierte en un must empresarial.
La figura del Legal Project Manager adquiere relevancia para estudiar y analizar la gestión del proyecto laboral, ya que, no sólo va a analizar los conflictos legales, también va a poder aproximar una relación de costes y necesidades para modificar la plantilla, anticipar posibles conflictos laborales y evitar futuras sanciones o multas.
En definitiva, la relación estratégica entre Letrados, Recursos Humanos y Gestores de Proyectos beneficia la estrategia de negocio.
Recuerda que cuanto mejores sean las relaciones laborales y el clima de trabajo, más motivado será su equipo; al fin y al cabo, toda empresa necesita un emprendedor que arriesga y una persona trabajadora que ejecuta.
Nuestro objetivo: conseguir que la relación laboral sea un win win.
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